La música sacra es uno de los primeros estilos musicales que existieron en los cultos, homilías o festividades religiosas con el fin de ofrecerlas a Dios sin importar el tipo de religión que se practique.
Según los expertos, la música sacra es una música sagrada por su connotación y es importante para diferentes corrientes religiosas, sobre todo para el cristianismo precisamente en las celebraciones religiosas, es un elemento esencial que lo componen, pues en ellas podemos cantar salmos, canciones espirituales, himnos y canciones espirituales.
Es importante destacar que desde sus inicios este tipo de música se ha transformado con el paso de los años, pero su propósito persiste y es el de acercar el corazón de los creyentes hacia Dios.
Evolución musical sacra
Según los historiadores y conocedores de toda esta evolución, indican que la música sacra era solo pequeños momentos de melodía, aun no se incluyen voces sino solo melodías a través de instrumentos.
En la música sacra no había ningún tipo de salto, disonancia, solo era una melodía creada para el momento de oración y el encuentro religioso que invita al creyente a orar y a alabar a Dios, luego de ello se fue incorporando la letra y así darle una mayor puntuación. A continuación te explicaremos la diferencia entre música sacra, religiosa y litúrgica.
La música sacra: es desde sus inicios la creada para las diferentes celebraciones y cultos religiosos durante el culto, sus características principales son la bondad y la santidad, debe ser visto como un arte verdadero y universal pues es así cuando pase de una nación a otra y no tendrá una impresión negativa.
En este acto litúrgico se puede encontrar un canto gregoriano, música para órganos y todos los instrumentos que se encuentran autorizados durante la liturgia, en pro de afianzar la fe y el amor a Dios.
La música religiosa: esta tiene una característica que las diferencia del resto y es que no se encuentra permitida para el culto divino, es un tipo de música más libre y que se enfoca en despertar la fe, la gratitud, la bondad y estimular en ellos un sentimiento piadoso del creyente, esta suele tener diferentes géneros musicales, desde una entonación más alegre hasta canciones más suaves y concentradas en la alabanza a Dios.
La música litúrgica: es un género musical que se caracteriza por interpretar el sonido original del ritual, siendo esto comprensible, además de que permite y conduce a los creyentes y que estos se involucren participen en la celebración religiosa.
Consideraciones finales
Desde el inicio de la iglesia así como de las diferentes religiones, podemos ver como estos templos poseen diferentes objetos y elementos de vital importancia para los participantes, desde objetos representativos de la religión, así como piezas elaboradas por los herreros y cerrajeros de la época.
Finalmente, la tradición musical de la iglesia a nivel universal es un tesoro invaluable para los practicantes, que se enaltece de todas las expresiones artísticas, porque el canto sagrado unido con las palabras, constituye una parte esencial en la liturgia solemne.